Fundidora cierra sus puertas
A partir de mañana, los más de 300 empleados del Parque Fundidora se irán a casa sin goce de sueldo.
Y es que, a un mes de reabrir sus puertas luego de las restricciones por COVID-19, la crisis financiera azotó este paraje.
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Esta decisión se tomó luego de que el organismo que administra el parque utilizó los últimos recursos que tenía para pagar la quincena del 15 de julio.
Fue el día de ayer cuando se llegó a esta difícil decisión, pues alegan no recibir el apoyo emergente que solicitaron el viernes al Gobernador de Nuevo León.
Dicho apoyo ascendía a 10 millones de pesos mensuales, para mantenimiento del inmueble, servicios y sueldos de sus empleados.
“Ninguna respuesta y ya estamos preparando el cierre total del parque a partir del jueves y enviando al personal a su casa en paro técnico”, indicó el director general del Parque Fundidora, Fernando Villarreal Palomo.
¿Cómo se manejan las finanzas de Fundidora?
El Parque Fundidora dejó de recibir recursos estatales desde 2018. En vista de esto, comenzaron a operar exclusivamente con ingresos propios.
¿De dónde salían estos ingresos?
- Rentas de concesionarios.
- Realización de eventos y festivales.
- Cobro de estacionamiento.
En 2019, estas actividades generaron ingresos por 221.1 millones de pesos, de acuerdo con el reporte de ingresos del organismo descentralizado.
Pero, entre marzo y junio de este año, cuando permaneció cerrado el parque, los ingresos se desplomaron cerca de 80 por ciento, al grado de no tener para pagar servicios o nómina.