Continúan extorsiones telefónicas desde cárceles
Dentro de la gama de delitos que destacan en la presente crisis de inseguridad se encuentra la extorsión telefónica, ilícito que se da de manera exorbitante en prácticamente todo el país, con la peculiaridad que la mayoría de las llamadas proceden de las cárceles.
En efecto, un estudio realizado por el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) de junio de 2017 a junio de 2018, el cual fue presentado ante el Senado, revela que anualmente se presentan 3.7 millones de llamadas de este tipo, las cuales son realizadas por internos de siete centros penitenciarios federales y estatales.
“Se confirma que hay una cantidad apreciable de equipos sospechosos en el conjunto de los penales de la muestra, y que incluso donde hay pocos equipos puede ocurrir una cantidad de llamadas con propósitos delictivos a lo largo del día, afectando a los usuarios y la calidad del servicio por las interferencias que generan los bloqueadores de señal instalados”, se destaca en el estudio.
Ante esto, el IFT recomendó a las autoridades del sistema penitenciario que hagan más eficientes los mecanismos de seguridad en cuanto a la introducción y uso de teléfonos celulares en las cárceles, así como a la instalación de equipos bloqueadores de señal.
En el estudio no se precisó cuáles son los penales que concentran el mayor número de casos detectados, pues es información que se mantiene reservada pero sí están identificados.